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Política

Año: 18

Número: 619

Cubanitos en la ciudad.

Cubanitos en la ciudad.

Siempre nos ha sorprendido la existencia de defensores del régimen cubano en nuestra ciudad. No en la gran urbe, no en Buenos Aires, donde hay de todo, hasta seguidores de Mao, acá, en la ciudad de Pedroni, en el corazón de la pampa. Y suena ridículo, absurdo y hasta increíble, pero, bueno, en los boliches siempre hay uno que levanta la defensa de la igualdad, todos somos iguales, el Comunismo empareja, el Estado se ocupa, en fin, éso, eso que todos sabemos. 

Es infantil en nuestra ciudad pero no tanto en la ciudad donde se asienta la corte. Claro porque últimamente el Presidente Fernandez se define como defensor del régimen castrista, con ingeniosos pretextos, tirando la culpa para cualquier lado, pero no puede tapar que lo defiende. Lo peor es que defiende la religión castrista a ultranza de quienes lo rodean y le escriben los libretos. O sea que no solo Fernandez es el que hace el ridículo poniéndose en contra del pueblo cubano, pueblo harto que sale a las calles exigiendo libertad para generar, para crear, para vivir su propia vida, grave que no sea solo Fernandez y se sume la camarilla kirchnerista y peor todavía que estos argentinos se pongan al frente de la defensa de la dictadura cubana. Claro, ya sé, no viven en Cuba, viven acá, solo se rasgan las vestiduras para pagar viejas deudas de la viuda, de su jefa. 

Pero acá. Que haya comunistas cubanos acá, es no solo ridículo, es hasta patético, porque sin duda, toda esta falsa oratoria es producto de la ignorancia. Tal vez alguno haya ido de vacaciones a Cuba, pero eso confirma el ridículod, no alcanza para comprender el principio de la caída de ese totalitarismo absurdo. Estamos viviendo tiempos raros, donde unos cuantos extraterrestres, organizados como una graciosa vanguardia, montados sobre el número (muchas veces conseguido con dádivas) nos quieren llevar a lugares desconocidos hasta por ellos mismos. Mirando las listas de concejales en la ciudad vemos que por esos espacios también existen pichones de cubanos. Increíble.